NOS ACARICIA LA FIEBRE DEL TÉ

Estas últimas intensas semanas, tuve el honor de participar en dos importantes eventos. El primero, Salón Internacional de Gastronomía del 5 al 8 de noviembre en Caracas, el segundo, Maracaibo Cooking del 13 al 15 de noviembre en Maracaibo. Con ellos confirmé que definitivamente el interés por el té nos llegó!
Tuve la oportunidad de tener una cata de té titulada “Conoce tres lugares de India desde tu taza” y una ponencia con degustación titulada “Las Razones para incluir el té en tu vida”, donde la respuesta a la convocatoria me llenó de profunda satisfacción.
Aunque el té es la segunda bebida más consumida en el mundo, definitivamente Venezuela no está incluida en esa estadística; durante los últimos diez años vi muchos intentos porque la hebra tuviera su espacio en nuestro mercado, pero no lograba calar.
Dolorosa realidad para aquellos que hemos sido tocados por esta maravillosa magia, no queremos ni podemos apartarnos de ella. Hoy siento que esa situación definitivamente cambió, hay un interés en el té! A mi juicio, en un mundo donde cada día estamos más interesados por lo sensorial, por conocer sabores, texturas, orígenes, por supuesto, el té con su variedad, calidad y propiedades no podía pasar desapercibido.
Combinado con un interés muy marcado de cada día ser y estar mejor, en lo profesional y lo humano, cada vez más exigente, está quedando en evidencia que el aliado perfecto es esa bebida milenaria que además de placer nos proporciona muchísimos beneficios.
En las catas tuvimos la oportunidad de despertar nuestro olfato, quedando en evidencia los distintos aromas que el lugar del cultivo de la Camelia Sinemsis puede desarrollar en el té. En boca las notas astringentes y esos retrogustos marcados de cada uno, le abrieron las puertas a los presentes al maravilloso mundo de las armonías, un mundo creativo y variado.
En la ponencia pudimos descubrir, a medida que nos deleitábamos con sabores y aromas en la degustación, todas las virtudes maravillosas que el té tiene para nosotros y como esas virtudes, de las que nos habla la tradicional y milenaria cultura del té, los científicos las han ido corroborando a medida que los estudios y experimentos van culminando.
Me satisface muchísimo los comentarios que a posterior he recibido donde puedo corroborar que la intención de despertar esa necesidad de incluirlo en la cotidianidad, quedó sembrada en quienes me acompañaron. Estoy muy agradecida por esta oportunidad!
Definitivamente, tomaTÉ un momento para vivirlo sorbo a sorbo!