Recientemente tuve la oportunidad de escuchar a esa voz que admiro y con la cual crecí, pronunciar el nombre de mi proyecto de vida: “Kepén”, y fue una sensación fascinante y difícil de describir.
Ser entrevistada por el Dr. Pedro Penzini, fue una cita deseada y procurada desde siempre por mi. Y es que su voz desde la radio, ha acompañado muchas de mis tardes, junto a la lectura ineludible de su columna, desde donde recibí inspiración por esa dedicación única de informar e instruir sobre salud y bienestar, y orientación sobre como transmitir las virtudes del té, producto estrella de mi proyecto.
Kepén o “Kepen”, sin acento, como sorprendentemente me encantó rebautizara la inconfundible voz del Dr. Penzini, con su particular acento, es un proyecto cuya razón es proponer un estilo de vida saludable, donde tomar té, sea un acto cotidiano reconocido por aportar placer y bienestar.
Inexpresable la emoción recibida al cumplir el sueño de ser reconocida por esa voz familiar que me embelesa, y que de manera imprevista me cita por su producción en tiempo oportuno, sumando una de las mas gratas satisfacciones que he recibido en esta misión de vida que infiere incentivar el consumo del té en Venezuela y la enseñanza de sus extraordinarios beneficios.
Venezuela escuchó sobre Kepén a través del insigne programa radial vespertino de Pedro Penzini, y yo escuché a la voz que más admiro, atenta a mis argumentos, conciente pese a la emoción, que estoy más cerca de lograr asir mi objetivo.
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